¿Comprendes el prospecto de los medicamentos?, según el informe del PIAAC, el Programa Internacional para la Evaluación de la Competencia de Adultos, para el español medio el prospecto de sus fármacos resulta difícil de comprender, y para las personas de edad más avanzada la comprensión se dificulta aún más.
Uno de los medicamentos de uso más extendido es el Omeprazol, siendo un mediamento de uso habitual lo normal es que su propecto fuera compensible para la gran mayoría de los pacientes, pero… ¿cuántos pacientes saben lo que son los inhibidores de la bomba de protones?, y no creo que este sea el único término que los pacientes no comprenden de su prospecto.
A la comprensión del prospecto, además de los complejos términos médicos que se utilizan, tampoco ayuda el pequeño tamaño de la letra, no olvidemos que las personas de más edad suelen ser los que necesitan un mayor número de medicamentos, y a ellos les cuesta especialmente leer esta letra tan diminuta que aparece con mil dobleces dentro de la caja de sus fármacos.
Otro tema delicado en los prospectos de los medicamentos es el dedicado a las posibles reacciones adversas que pueden provocar y las contraindicaciones, que hacen que muchos pacientes tomen sus medicinas con miedo al no comprender la larga lista de efectos adversos y contraindicaciones que suelen aparecer, siguiendo con el mismo ejemplo del Omeprazol, en su prospecto se describen 3 posibles efectos adversos frecuentes, 8 poco frecuentes, 17 raros y 7 muy raros. Y mientras se describen se da por hecho que el consumidor sabe qué es una plaqueta (pequeña célula que participa en la reparación de vasos sanguíneos), una inmunodeficiencia (deficiencia de alguno de los componentes del sistema inmune, aquel que nos protege de las enfermedades) o un habón (elevación de la piel por una inflamación local, con escozor).
Fuente: Abc