El virus ZIKA ha motivado la primera declaración de emergencia sanitaria global en 2016 por parte de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Aunque se han detectado casos de transmisión del virus por vía sexual por presencia en el semen y contagios por vía sanguínea, la principal forma de transmisión es la picadura de un mosquito Aedes aegypti infectado, el mismo que transmite el dengue y la chikungunya
Síntomas del virus ZIKA
Los pacientes con enfermedad por el virus de Zika suelen presentar fiebre no muy elevada, exantema y conjuntivitis, síntomas que suelen durar entre 2 y 7 días. Por el momento no hay vacunas ni tratamientos específicos para esta enfermedad y la mejor forma de prevenirla consiste en la protección frente a las picaduras de los mosquitos.
Por eso, la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios ha publicado un Listado oficial de repelentes de insectos de uso humano eficaces frente a mosquitos del género Aedes, posible transmisor del virus ZIKA, recomendados para prevenir la infección asociada.
Los primeros brotes de enfermedad por el virus de Zika se describieron en el Pacífico en 2007 y 2013 (Yap y Polinesia francesa, respectivamente), y en las Américas (Brasil y Colombia) y África (Cabo Verde) en 2015. A ello hay que añadir que más de 13 países de las Américas han notificado infecciones esporádicas por el virus de Zika, lo cual indica que este está teniendo una rápida expansión geográfica.
Prevención
Para evitar las picaduras conviene utilizar repelentes de insectos regularmente, ponerse ropa (preferiblemente de colores claros) que cubra al máximo el cuerpo, utilizar barreras físicas (pantallas protectoras, puertas y ventanas cerradas) y si fuera necesario utilizar protección personal adicional, como dormir con mosquiteros durante el día. También es sumamente importante vaciar, limpiar o cubrir regularmente los contenedores que puedan acumular agua, como cubos, barriles, macetas, etc.
Se deberían limpiar o eliminar otros posibles criaderos de mosquitos, como macetas, neumáticos usados y canalones. Las comunidades deben apoyar los esfuerzos del gobierno local para reducir la densidad de mosquitos en su localidad.