Los laboratorios farmacéuticos Abbott han sido condenados a pagar una multa de 1.600 millones de dólares por incluir en el prospecto de su fármaco Depakote, un medicamento neurológico, usos para los que no estaba indicado ni habían sido aprobados por el Gobierno de Estados Unidos.
Los afectados que han denunciado el caso recibirán unos 64,3 millones de euros de indemnización, 800 millones de dólares se repartirán entre distintas agencias estatales y 700 millones de dólares serán de multa.
Durante los últimos 10 años, Abbott ha vendido Depakote para una amplia variedad de usos no autorizados. “Entre las prescripciones falsas del medicamento estaban su uso para el control de la agitación y la agresividad en pacientes de edad avanzada que sufrían demencia y para el tratamiento de la esquizofrenia u otros trastornos psiquiátricos graves. Todo esto a pesar de la ausencia de evidencia científica que lo respaldara”.
Depakote, aprobado en 1983, es un fármaco anticonvulsivo y estabilizador del ánimo que está aprobado por la Federación del Medicamento Estadounidense (FDA) solo para el tratamiento de la epilepsia, trastorno bipolar y la prevención de la migraña.
James M. Cole, miembro de la Fiscalía, ha señalado que “Además existen pruebas de que dicha compañía ofreció dinero y en algunos casos pagó a profesionales de la salud y farmacias para alentarlos a promover y prescribir dicho medicamento”. Abbott también animaba a los asilos a burlar las regulaciones impuestas por la ley y así poder suministrar este fármaco a los ancianos.
Laura Schumacher, consejera general de Abbott, ha declarado que «Estamos aliviados de resolver este asunto y estamos seguros de que tenemos los programas adecuados para satisfacer las exigencias de este acuerdo».