El Congreso ha mostrado un rechazo contundente al anteproyecto de Ley de Servicios Profesionales presentado por el Ministerio de Economía que planteaba la reforma del modelo de farmacia.
Contra este anteproyecto de Ley ya se habían declarado el sector farmacéutico, y ahora se han sumado en contra de él la mayoría de los grupos del Congreso de los Diputados y el Ministerio de Sanidad.
El anteproyecto de Ley de Servicios Profesionales planteaba, en el primer borrador, la posibilidad de «suprimir la reserva exclusiva de la propiedad y la titularidad de las farmacias al farmacéutico«, una medida que ha sido catalogada de un error por los diversos grupos de la oposición, mientras que desde el Ministerio de Sanidad se «defiende el sistema vigente en España porque gracias a este modelo, que garantiza que la farmacia es uno de los establecimientos sanitarios más cercano a los ciudadanos, ha sido posible avanzar en el buen uso de los medicamentos».
José Martínez Olmos, portavoz de Sanidad socialista en el Congreso, ha declarado que «la intención de Economía no es otra que favorecer a intereses de multinacionales a costa de poner en peligro el interés general de preservar la calidad del SNS».
Mientras que Gaspar Llamazares, ha declarado que «con la excusa de la liberalización da curso a las posiciones más ultraliberales, convirtiendo en un instrumento puramente comercial al medicamento y produciendo la fractura de una farmacia sanitaria que debería estar siempre muy vinculada al SNS».
Los grupos nacionalistas también se han mostrado contrarios al borrador presentado por el Ministerio de Economía e Isabel Sánchez, portavoz de Sanidad del PNV, ha argumentado que «Estaremos muy vigilantes por si esta nueva norma sigue la senda emprendida por el Gobierno de desfigurar el sistema sanitario, troceando el derecho a la salud y convirtiendo sus partes en lucrativos negocios para algunos».
Aunque no todos se han mostrado en contra de esta medida, desde UPyD, Carlos Martínez aseguró que la medida traería una mayor competitividad al sector. «La propuesta, aunque llega con retraso, incluye las directivas europeas que son necesarias. Por tanto, nosotros estamos a favor de toda medida que ayude a alcanzar una economía más competitiva». Además, aseguró que en el sistema colegial vigente para las oficinas de farmacia «no es lógico porque no se entiende que para abrir una farmacia el propietario tenga que ser farmacéutico. Es como si el dueño de un restaurante tuviera que ser cocinero».