En Castilla León, a mediados de este mes de marzo, se va implantar un nuevo modelo de receta en el que incluirá la hoja de medicación de cada paciente y el coste de los fármacos prescritos.
Según ha explicado Antonio María Sáez Aguado, consejero de Sanidad de Castilla y León, esta es la «primera medida informativa para los ciudadanos sobre el coste de los servicios sanitarios» para que «valoren mejor el coste de la sanidad pública y también hagan una mejor utilización de los recursos».
Además em las farmacias castellanoleonesas podrán dispensar a los pacientes medicamentos de marca con recetas por principio activo cuando su precio sea igual o menor que el establecido por el Ministerio de Sanidad.
Con estas medidas Castilla y León se adapta a la nueva regulación estatal sobre prestación farmacéutica para tratar de reducir el gasto farmacéutico, que en la Comunidad representa en torno a 1.000 millones de euros, de los que casi 750 se destinan al pafo de recetas y el resto en medicinas hospitalarias
Otras de las novedades en Castilla y León es que en los hospitales y consultas externas se está empezando a implantar la prescripción electrónica de medicamentos, igual que se hace en Atención Primaria, y en la próxima semana se comenzarán las pruebas para implantar la prescripción informatizada en las recetas de Atención Especializada, algo que el Consejero valora muy positivamente «porque avanza en la integración entre Atención Primaria y Especializada, reduce los riesgos y duplicidades, y nos permitirá avanzar en la línea de la eficiencia, que es uno de nuestros empeños»