Ya hemos hablado en muchas ocasiones del rechazo de los profesionales sanitarios a la prescripción por principio, y después de que esta medida lleve dos meses funcionando las críricas siguen llegando.
Entre los motivos para implantar la prescripción por principio activo se encuentra intentar «aliviar la tensión financiera de los servicios de salud, junto con otras medidas tendentes a mejorar la equidad, la cohesión y la calidad del sistema». Sin embargo los afirman que la situación no se ha hecho más homogénea, sino más bien lo contrario.
Los datos facilitados por las consejerías y por la consultora IMS revelan que, como resultado de los nuevos criterios de prescripción, pueden distinguirse tres grupos:
- En el que la marca recupera mercado, en el que están Galicia y Andalucía, cuya prescripción por principio activo hasta ahora superaba el 85 por ciento
- En el que la situación se mantiene aproximadamente igual que antes de la entrada en vigor de la prescripción por principio activo, en esta situación se encuentran el País Vasco, Asturias, Castilla y León y Castilla-La Mancha.
- En el que se percibe un crecimiento de la demanda de genéricos, como es el caso de Valencia, Murcia, Baleares, Madrid, Navarra y Extremadura.
Para llegar a estas conclusiones se han analizado los datos del primer mes de aplicación de la prescripción y se han comparado con el mes anterior.