Está totalmente prohibido por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) comercializar cualquier medicamento que los ciudadanos hayan devuelto a la farmacia a través de los puntos SIGRE.
Y desde SIGRE, una entidad sin ánimo de lucro que no obtiene beneficios por su actividad, quieren dejar totamente claro cuál es su método de trabajo para que no haya confusiones con las noticias que están apareciendo relacionadas con el “Caso Campeón”, por el que supuestamete se iba a realizar un reenvasado de residuos de medicamentos devueltos por los ciudadanos a la farmacia, con el fin de proceder a su venta en países del Tercer Mundo.
SIGRE no tiene nada que ver con esta actividad y todos los residuos depositados por el ciudadano en los Puntos SIGRE de la farmacia son trasladados a la Planta de Clasificación de Residuos de Medicamentos, donde son separados y clasificados para obtener tres grupos diferenciados de fracciones de residuos que requieren de un tratamiento medioambiental específico:
- medicamentos peligrosos, que se entregan a gestores de residuos especializados para su eliminación
- envases, que una vez clasificados por materiales son enviados posteriormente a empresas recicladoras
- medicamentos no peligrosos y aquellos envases de medicamentos que no son susceptibles de ser reciclados, se utilizan como combustible en instalaciones industriales o para producir energía eléctrica.
Es decir, en ningún caso los medicamentos depositados en los puntos SIGRE son reenvasados ni reutilizados.