El laboratorio inglés GlaxoSmithKline ha sido sancionado por Gobierno de Argentina por probar medicamentos con niños.
GlaxoSmithKline fabrica la vacuna Antineumocócica conjugada 10 valente, una vacuna obligatoria en calendario de vacunación para bebés que se utiliza para prevenir la neumonía y la otitis aguda.
La empresa farmacéutica fue investigada tras comprobar que se habían cometido irregularidades en los ensayos clínicos para que la vacuna pediátrica fuera aprobada, concretamente entre los años 2007 y 2008 la empresa cometió irregularidades para conseguir el consentimiento de los padres para que sus hijos recibieran la vacuna en experimentación.
El juez argentino Marcelo Aguinsky ha confirmado que algunos de los consentimientos para la prueba de esta vacuna se dieron por padres menores de edad, abuelos no autorizados como tutores, parientes analfabetos… además las vacunas fueron suministradas a los niños sin conocer sus historias clínicas y sin realizar un seguimiento apropiado de las reacciones adversas que les podría provocar.
GlaxoSmithKline recuerda que la vacuna fue aprobada en más de 85 países a partir de 40 estudios y alega que en Argentina las pruebas para conseguri la autorización de la vacuna se rigieron por “los más altos estándares éticos y científicos internacionales” y teniendo en cuenta “las leyes y costumbres del país”
Por su parte la Federación de Profesionales de la Salud de la Argentina (Fesprosa) pide una ley que regule la investigación biomédica y establezca la responsabilidad penal de los profesionales y empresas que no actúen con ética.