Perú es el primer país Latinoamericano que se integra en el grupo de apoyo al Comité de Farmacovigilancia del Grupo Mundial de Trabajo de Armonización (GHTF), que garantiza que los recursos productivos y equipos médicos usados en el mundo cumplan los estándares de calidad.
Entre los dispositivos médicos que el GHTF tiene que comprobar para garantizar y protejer la salud pública se encuentran desde las cosas más sencillas como el algodón, gasas, jeringas, instrumental quirúrgico hasta equipos biomédicos para radiología, tomografías o resonancias magnéticas.
Según ha explicado Carmen Bartra Saavedra, representante del GHTF en Perú y miembro del equipo de farmacovigilancia de la Dirección General de Medicamentos, Insumos y Drogas (Digemid) del Ministerio de Salud, “El trabajo que realizamos es trascendente y delicado, porque si alguno de estos dispositivos no ha pasado por los controles necesarios para garantizar su calidad, su uso pondría en riesgo la vida de las personas.»
Carmen Batra ha destacado que en Perú se ha comprendido la importancia de la tecnología médica y que cuando ello se extienda a todos los gobiernos, inclusive a otros de Sudamérica, se desarrollaran normas que promuevan la innovación tecnológica y faciliten el comercio internacional, garantizando su efectividad, funcionabilidad y seguridad.