Con la Farmacovigilacia se pretende comprender, y sobre todo prevenir, los efectos adversos de los medicamentos, y para que esta ciencia sea realmente efectiva es necesario que se mantenga en el tiempo, incluidos los medicamentos que se llevan comercializando años sin que se hayan observado Reacciones Adversas Graves.
Un ejemplo que demuestra la importancia de mantener la Farmacovigilancia en el tiempo es lo que ha ocurrido con el medicamento Voltaren en gel (Diclofenaco sódico en gel tópico), un medicamento que al ser de uso tópico es considerado inocuo para muchas personas.
A pesar de que Voltaren en gel lleva muchos años en el mercado la FDA (Food and Drug Administration) ha anunciado que va a exigir nuevas advertencias sobre los efectos secundarios que puede provocar este medicamento recomendado para la artritis, entre otras dolencias.
Según se ha podido comprobar el uso de Voltaren en gel se ha vinculado a casos de hepatoxicidad por fármacos que han provocado daños en el hígado, llegando incluso a provocar la necesidad de un transplante de hígado o la muerte.
Los cambios de la nueva etiqueta de advertencia indica que el gel, y todos los productos que contienen diclofenaco sódico, han dado lugar a graves reacciones hepáticas, incluyendo necrosis hepática, ictericia, insuficiencia hepática. Los síntomas comenzaron a aparecer en algunos casos dentro del primer mes de tratamiento.